Daniel Caverzaschi: Hay que aprender de tus errores, aceptar donde tienes menos fortalezas y trabajar sobre ellas
Platicamos con Daniel Caverzaschi sobre su carrera como tenista, logros, retos profesionales y sueños por conquistar. También conocemos su faceta como estudiante de economía y el reto que fue compaginarlo con el deporte. Una historia de metas cumplidas, por cumplir y el firme objetivo de llegar a ser el número uno a nivel mundial en su deporte.
¿En qué momento te diste cuenta de que querías ser deportista?
Siempre había practicado deportes desde pequeño. Me gustaba mucho el deporte, no sé si quería ser deportista pero siempre estuve muy enfocado al deporte. Cuando a los 12 o 13 años estaba compitiendo tanto en esquí-alpino como en tenis y no tenía tiempo para nada, compaginándolo con el colegio pero ya estaba empezando a competir a nivel nacional e internacional y finalmente decidirme por el tenis. Tenía claro que quería compaginarlo con los estudios, que lo primero eran los estudios; mis padres me inculcaron eso y también estaba de acuerdo. Terminé los estudios en 2014, tomé la decisión de dedicarme profesionalmente y hasta la fecha.
¿Qué estudiaste?
Estudié economía en la Universidad de Warwick en Inglaterra.
¿Quiénes han sido tus ejemplos a seguir a lo largo de tu vida?
Mi padre siempre fue un referente porque me ayudaba con mi tenis, pero también en la vida, en el mundo laboral, en los estudios. Aprendí de su manera de gestionar las presiones y el tiempo. Obviamente he tenido muchos referentes a nivel deportivo, Rafa Nadal y David Ferrer, sobre todo por el esfuerzo, sacrificio, por la fuerza mental que tienen. He tenido varios referentes; intento copiar a los mejores, intento sacar lo mejor de cada uno.
¿Qué retos tienes por conquistar profesionalmente?
Estoy sumergido en mi carrera, estamos mejorando mucho; actualmente soy el número uno en España y 14 en el mundo y el sueño y objetivo a largo plazo es ser número uno en el mundo.
¿Cómo defines tu ética de trabajo?
Cuando tengo un objetivo soy muy tenaz, hago todo por conseguirlo, tengo mucha capacidad de sacrificio, de esforzarme y me he dado cuenta con los años a aprender de tus fallos, tus errores, aceptar donde tienes menos fortalezas y trabajar sobre ellas. Es algo que he ido aprendiendo y va a ser clave si queremos llegar a lo más alto, si queremos llegar a la excelencia.
¿Qué hábito ha sido fundamental para tu éxito?
Gestionar mi tiempo ha sido clave pero a la vez ha sido muy difícil, sobre todo compaginar deporte con los estudios. Saber manejar mi tiempo, hacer sacrificios, quizá menos ocio, menos salidas con los amigos, menos viajes y más estudiar, entrenar y estar centrado.
¿Qué te inspira?
Superarme, aprender, sentirme que voy mejor y la sensación del trabajo bien hecho.
¿Cómo te mantienes saludable?
Esto de que el deporte solo aporta salud, eso es mentira, el deporte tienes dolores siempre, pero obviamente si cuidas tu cuerpo y si cuidas tu mente, está bien. La alimentación la cuidamos mucho, estamos trabajando con un nutricionista, el ejercicio no me falta y creo que si cuidas tu mente, cuidas tu cuerpo, es una parte clave de tu vida.
¿Qué te dijeron que era imposible o creíste imposible y después lograste?
En mi primer año de Universidad, tenía el objetivo de aprobar ese año, aprobar era el único objetivo porque quería compaginarlo con calificarme en los Juegos Olímpicos de Londres; hicimos el planning del año y entre febrero y mayo iba a jugar torneos internacionales, hablé con el Decano de la Universidad y me dijo: “Estando tanto tiempo fuera de la Universidad, es casi imposible que apruebes todas, lo normal es que suspendas” , lo duro es cuando me notificaron que la semana de recuperación iba a coincidir con los juegos de Londres; entonces claro, si no aprobaba todas en mayo después de nueve torneos internacionales estando prácticamente tres meses fuera de la Universidad, posiblemente me echaban de la Universidad, no iba a tener una segunda oportunidad, me recomendaron tomarme un año sabático, dedicarme al tenis y el año que viene empezar otra vez el primer año.
Hablé con mis padres, la situación era difícil porque no quería perder un año de Universidad y además el costo que suponía repetir el año, entonces decidí compaginar las dos cosas y fue una de las cosas de las que más orgulloso me siento; haberme arriesgado aunque podría no haber salido bien pero finalmente me clasifiqué, a base de garra y de estudiar hasta las 3 a.m y mucho trabajo y sacrificio y no tener días durante un mes, conseguí aprobar todas y clasificar a los Juegos, los dos objetivos. Recuerdo esa época como muy dura pero con la sensación de haber cumplido esos objetivos y cuando competí en Londres pensaba en todo lo que me había costado llegar hasta ahí, fue muy especial. Fue un momento que quizá se consideraba imposible pero se consiguió.
¿Qué amas?
A mi familia, a mis amigos más cercanos, a mi gente, es una pieza muy importante. La buena gente, gente que me quiere, gente que está conmigo incondicionalmente, he tenido la suerte de rodearme de muy buena gente.
¿Qué te hace sonreír?
El humor de mis amigos cercanos y de mi gente.
¿Qué te da miedo?
Me da miedo que pase algo que no pueda controlar. Una enfermedad sobre todo o que a mi familia, a mis amigos, a mi gente cercana o a mi nos pase alguna enfermedad. Eso es lo peor. Viví eso en la muerte de mi padre que murió de cáncer en 2014 y eso creo que es lo más duro porque es algo que no depende de ti, por mucho esfuerzo, por mucha garra que le pongamos, no depende de ti.
¿Cuáles han sido las mejores lecciones de vida que has tenido hasta ahorita?
El tenis en general es una lección de vida constante. Es un deporte muy duro, muy calificado, muy psicológico, que constantemente te da baños de humildad, te hace reflexionar sobre lo duro que es y lo importante que es la humildad, el aprender a levantarse. El tenis es una lección de vida y te da valores y habilidades que son aplicables a tu vida.
¿Cuál es el mayor riesgo que has tomado?
En 2014 estuve a punto de dejar el tenis porque veía que me iba a graduar, finalmente lo hice con matrícula de honor, tenía muchas posibilidades de trabajar, tener un trabajo como el resto de mis amigos, un trabajo bien remunerado y con buenas posibilidades para el futuro y no tenía sentido dedicarme al tenis estando en un país con tan poco apoyo, que le dan tan pocos recursos al tenista en silla. Pero finalmente tomé la decisión de seguir mi sueño deportivo, mi pasión. Tomé un riesgo, no me arrepiento para nada.
¿Cómo te ves en 10 años?
Ojalá el número uno en el mundo y también cumpliendo otros objetivos que tengo míos, con un proyecto, a lo mejor tener mi propia empresa. Pero lo principal ser número uno en el mundo y ser una persona feliz.
Favoritos
Película: El curioso caso de Benjamin Button
Libro: El Principito
Lugar: Madrid
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https://twitter.com/danicaver