El pasado 17 de septiembre, la Fórmula 1 conquistó las calles de Singapur en una emocionante
carrera nocturna en el circuito de Marina Bay. Personalmente, diría que ha sido una carrera
histórica, ya que es la primera en esta temporada en donde la victoria se la llevó un piloto que no
pertenece a la escudería que ha dominado toda la temporada: Red Bull Racing.
La victoria se la llevó el piloto madrileño Carlos Sainz de la escudería Ferrari, quien compartió el
podio con su excompañero de equipo, Lando Norris (McLaren) y el 7 veces campeón del mundo
Lewis Hamilton (Mercedes AMG). Sin duda, fue una carrera en donde Sainz demostró un
excelente manejo de neumáticos y dominio desde la “pole position” durante las 62 vueltas hasta
obtener el 1er lugar, pero sin duda alguna, lo hizo también gracias al gran trabajo en equipo que
vimos reflejado entre Sainz y Norris para defender sus posiciones durante las últimas vueltas de
la carrera en donde Sainz se encargó de mantenerse lo suficientemente cerca de Norris para
darle DRS (Drag Reduction System) y darle una ventaja para defender su posición de los pilotos
de Mercedes.
Carlos Sainz y Lando Norris son dos de los pilotos más prometedores de la Fórmula 1. Ambos
jóvenes, talentosos y con un gran futuro por delante. Sin embargo, más allá de su talento, Sainz
y Norris también son grandes amigos lo cual fue clave para asegurar el 2do lugar de Norris en la
carrera, así como proteger la victoria de Sainz. Se conocieron en 2014, cuando ambos competían
en la Fórmula Renault 3.5. En ese entonces, el piloto de Ferrari tenía más experiencia en el
deporte, mientras que Norris era un novato. Sin embargo, los dos se llevaron bien desde el
principio y continuaron cultivando su relación como compañeros dentro y fuera de la pista.

En 2019, se convirtieron en compañeros de equipo en McLaren, en donde los pilotos tuvieron un
buen rendimiento en su primera temporada juntos, y McLaren terminó la temporada en la cuarta
posición del campeonato de constructores, fue ahí donde su amistad se fortaleció y surgió el
famoso “Carlando”. Mas allá de su relación amistosa, siempre han sabido impulsarse
mutuamente manteniendo una sana competencia y respeto como pilotos.
En 2021, Sainz firmó con la escudería Ferrari, mientras que Norris se quedó en McLaren. Sin
embargo, la amistad entre los dos pilotos se mantuvo intacta y lo sigue siendo hasta el día de
hoy. La amistad entre Sainz y Norris se ha visto reflejada en su trabajo en equipo la cual les
consiguió el podio este año en el Gran Premio de Mónaco, además del Gran Premio de Singapur.
Incluso cuando hay rivalidad en los deportes, un verdadero líder y campeón sabe cuándo es
necesario trabajar en equipo para conseguir una meta en común. Esto es reflejo de la madurez,
respeto y disciplina entre deportistas que deberíamos de tomar como ejemplo para nuestra vida
diaria. Una vez que somos capaces de dejar las diferencias de lado y ver más allá, es posible
conseguir nuestros objetivos. Claramente, el trabajo y desempeño individual de los pilotos fueron
gran parte del éxito para ambos en el circuito de Marina Bay, pero definitivamente, el trabajo en
equipo y la estrategia fueron otros ingredientes que volvió posible que Carlos Sainz terminara la
racha de victorias del ahora el 3 veces campeón del mundo Max Verstappen.